¿Vivienda para los que menos tienen?: programas sociales no contemplan a la población en situación de calle
Tanto la Presidenta Claudia Sheinbaum como Clara Brugada, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, han promovido programas sociales de vivienda asegurando que están dirigidos a quienes menos tienen o más la necesitan, pero no consideran, por ejemplo, a personas en situación de calle. Tampoco toman en cuenta la planeación urbana a largo plazo, señalan especialistas.
“Ese es el Programa Nacional de Vivienda para el Bienestar, un millón 100 mil viviendas para los que menos tienen”, dijo la Presidenta en la conferencia del 14 de julio y el 9 de agosto la Comisión Nacional de Vivienda inició el registro de personas que buscan ser beneficiarias.
En febrero de 2025, el gobierno de Brugada firmó un convenio de colaboración con el programa federal. Mientras que el Instituto de Vivienda de la Ciudad de México tiene al menos tres programas: el de Vivienda en Conjunto, con diferentes modalidades para otorgar financiamiento; el de Mejoramiento de Vivienda, un apoyo financiero a los procesos de mantenimiento; y el de Vivienda Pública en Renta, para quienes no tienen casa propia.
“Que el Gobierno, el sector público, haga los mayores esfuerzos que pueda por garantizar este derecho, porque si no interviene el Estado, queda totalmente a merced de los intereses privados”, advierte Claudio Nieto, arquitecto y diseñador urbano.
Las reglas de operación del Programa Nacional de Vivienda para el Bienestar indican que las personas beneficiarias podrán tener un ingreso familiar de hasta 5 UMAs, para que cuenten con la capacidad económica para realizar las aportaciones mensuales del monto recuperable otorgado para la vivienda, lo que excluye a quienes menos tienen o más lo necesitan.
No contemplan a población callejera
El Censo de Población y Vivienda 2020, realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, revela que en el País hay 5 mil 778 personas en situación de calle. De ese total, en la Ciudad de México existen mil 226 personas que carecen de vivienda.
Mientras que el conteo anual de personas en situación de calle de la Ciudad de México registró mil 124 hasta marzo de 2024, de las cuales 86 por ciento son hombres y 14 por ciento mujeres que, en su mayoría, llevan de uno a 10 años viviendo en la calle.
Sin embargo, es un cálculo aproximado. No existen cifras definitivas que contabilicen a las personas en situación de calle, pues sus propios contextos dificultan poder censar dicha población.
Como te contamos en esta publicación, el no conocer de forma certera la cantidad de personas que viven en calle es un problema que genera invisibilización al negar de forma sistemática sus derechos, como el de acceso a una vivienda digna.
“Los programas de vivienda tanto a nivel federal como a nivel local de la Ciudad de México no contemplan a las poblaciones callejeras dentro de sus objetivos de vivienda, este tipo de programas considera solo a un cierto sector de la población”, menciona Luis Enrique Hernández, director general de El Caracol, en entrevista con El Sabueso.
Se trata de una organización para la defensa de derechos humanos de personas que habitan el espacio público al formar parte de las poblaciones callejeras.
“La vivienda tiene un costo, no hay ninguna que sea gratis. La vivienda, aunque está planteado que es un derecho, está dentro de un margen económico, la tienes que pagar, ya sea por renta o porque la compres y no se percibe a la población de calle con capacidad económica”, señala Hernández.
Los programas sociales de vivienda no ven a la población de calle como beneficiaria de origen por razones de discriminación, de capacidad económica o para cubrir los requisitos de identidad, como acta de nacimiento o Clave Única de Registro de Población. El programa de Vivienda en Conjunto considera únicamente a la población asentada en campamentos.
El director general de El Caracol llama a diseñar programas para que estas personas tengan acceso a documentos de identidad y puedan apoyarles para que tengan una vivienda temporal y posiblemente una vivienda que les pertenezca.
Expertos señalan la importancia de la planeación urbana a largo plazo
Especialistas consultados por El Sabueso reconocen que los gobiernos federal y local estén implementando programas de vivienda, sin embargo, señalan la importancia de contemplar la planeación urbana a largo plazo.
“Una planeación que tome en cuenta no sólo el tema del ordenamiento de los usos de suelo, sino en dónde residen las industrias, la población, poder cuantificar la magnitud de esa población que requiere vivienda o que está ocupándola en condiciones desfavorables”, explica Alejandro Emilio Suárez Pareyón, arquitecto por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Ambos arquitectos coinciden en no dejar que la posible reserva territorial para desarrollar vivienda esté en manos de quienes hacen negocio.
“A mí me preocupa, desde el punto de vista del urbanismo cómo se van a cubrir estas necesidades de vivienda, porque los programas, al menos en el sitio oficial en el que presentan la información, no son muy específicos en tanto a territorialmente cómo se van a cubrir estas necesidades”, comenta Claudio Nieto.
El Programa Nacional de Vivienda para el Bienestar, por ejemplo, enlista como requisito el residir en una zona considerada como polígono prioritario de atención, que corresponden a municipios, localidades y áreas geográficas caracterizadas por alta o muy alta marginación y rezago social. Pero habría que considerar si garantizan el acceso a servicios públicos y centros de trabajo.
“A mí lo que me preocupa es que tristemente la planeación en nuestro país casi siempre se da bajo un inmediatismo político de querer respuestas a la brevedad para problemas que requieren planeación a bastante largo plazo. Tenemos que ir rompiendo la práctica de la planeación a los tiempos que duran las administraciones, necesitamos soluciones que tardan mucho más en madurar que seis años”, indica el arquitecto Claudio Nieto.