Violencia en Sinaloa deja rezago escolar: se perdió un mes el ciclo pasado
La escalada de violencia que se vive en Sinaloa desde septiembre de 2024 generó afectaciones significativas en el ámbito educativo, con suspensión prolongada de clases, cierre de planteles y pérdida de aprendizaje para miles de estudiantes, según alertó la organización Mexicanos Primero Sinaloa.
Nuria Alejandra González Elizalde, directora de esta organización, explicó que desde el estallido de violencia ocurrido en septiembre, diversos municipios enfrentaron interrupciones en las actividades escolares, lo que impactó directamente a la comunidad educativa.
“Desde septiembre del 2024, como todos sabemos, muchos municipios o varios municipios vivieron episodios de inseguridad e interrumpieron las clases. Generó miedo, estrés entre toda la comunidad, estudiantes, los docentes y las familias”, señaló.
A partir del monitoreo realizado por la organización, se detectó que dos semanas después de que se agudizó la violencia en Culiacán, más de la mitad de las escuelas cerraron: de un total de 978 planteles, 582 suspendieron actividades presenciales. Aquellos que sí abrieron registraron asistencia mínima: 10 por ciento en preescolar, 11 por ciento en primaria y 27 por ciento en secundaria.
González Elizalde informó que incluso para el mes de diciembre aún había 97 escuelas cerradas, y que un 19 por ciento de los estudiantes no acudía a clases o bien tomaba las sesiones en línea.
“Y nosotros tenemos documentado que a solo dos semanas del estallido de la violencia en Culiacán, por lo menos, de las 978 escuelas, 582 cerraron. Y en aquellas que abrieron la asistencia era mínima, del 10 por ciento en preescolar, 11 por ciento en primaria, 27 por ciento en secundaria. Todavía para diciembre había 97 planteles que seguían cerrados. Y el 19 por ciento, casi el 20 por ciento, no asistía las clases o bien las tomaba en línea”, expuso.
A partir del mismo monitoreo, explicó, se estimó que durante el periodo comprendido entre septiembre de 2024 y enero de 2025 se perdieron al menos 30 días de clase debido directamente a la violencia. Esta pérdida, insistió, representa un retroceso importante para el aprendizaje de niñas, niños y adolescentes.
“De este mismo seguimiento y monitoreo a medios que hemos hecho estimamos que de septiembre a enero por lo menos se habían perdido 30 días de clase con motivo de la violencia”.
A la crisis educativa se suma la violencia directa contra menores de edad. En el mismo periodo, de septiembre de 2024 al 3 de julio de 2025, se tiene registro de que 50 menores fueron asesinados en Sinaloa, una situación que, enfatizó González Elizalde, no debe considerarse como normal.
“De septiembre (2024) al 3 de julio (2025) 50 menores fueron asesinados. Esto pues nosotros partimos de que no es algo que tendría que normalizarse. Y tendríamos que estar muy preocupados y justamente reflexionando qué sigue en este ciclo escolar”, mencionó.
En respuesta al rezago educativo, la Secretaría de Educación Pública y Cultura de Sinaloa anunció en noviembre una estrategia emergente de recuperación de aprendizajes. González Elizalde reconoció el esfuerzo como un primer paso, aunque consideró que la medida es insuficiente ante la gravedad del contexto.
“En noviembre, creo que más o menos fue como en noviembre, la Secretaria Gloria Himelda anunció una estrategia emergente de recuperación de aprendizajes. Nosotros valoramos que se haya planteado porque al final reconoce de alguna manera la urgencia de una medida de esta naturaleza y valoramos que se haya planteado un intento de respuesta por ante la gravedad del rezago, pero nosotros creemos que este esfuerzo no es suficiente”, dijo.