Malecón
Que cada quien decida
Diez mil elementos de seguridad para cuidar las fiestas patrias en Sinaloa. El número impresiona, pero también genera preguntas: ¿qué tanto se necesita blindar una celebración que, en teoría, debería ser símbolo de unidad, alegría y confianza ciudadana?
El Gobernador Rocha asegura que cada quien decidirá si acude o no al Grito en Culiacán, respetando las voces que circulan en redes sociales llamando a no asistir. Es democrático, pero también deja entrever que el miedo está presente, y que el ánimo festivo no es suficiente para disiparlo del todo.
El despliegue interinstitucional será robusto, con fuerzas municipales, estatales y federales. Sin embargo, el hecho de que deba recurrirse a semejante operativo para garantizar tranquilidad habla de la fragilidad de esa misma tranquilidad. La confianza en las instituciones no se decreta, se construye, y ahí es donde se aprecia el hueco que llevamos un año sintiendo.
Los artistas anunciados siguen en la cartelera, pese a llamados en redes para que cancelen. Nadie ha declinado aún, pero la fiesta se percibe bajo la sombra de la desconfianza. ¿Habrá Grito masivo o será un eco apagado en la explanada? Al final, más allá del número de elementos desplegados, la verdadera medida será si la ciudadanía decide hacerse presente en la fiesta oficial o quedarse en casa.
Mejora empleo, pero todavía falta
El dato de los más de 10 mil nuevos empleos registrados en el IMSS durante el mes de agosto pasado es una buena noticia sin duda para el estado, porque aún cuando éstas se ubican en la típica tendencia de la estacionalidad anual tras el fin del verano, que es la temporada más baja del año, sí se nota un repunte que vale la pena reconocer.
Lo señalamos porque, en el contexto de una guerra criminal que sigue tan vigente como desde el primer día, el dato demuestra que hay una resiliencia económica que da la pelea al impacto de la crisis de violencia.
Pero celebrar una cifra mensual mientras la comparación interanual es negativa no es lo correcto, porque aunque da una idea de avance, la brecha contra el año pasado nos sigue diciendo que la economía es ahora más pequeña de lo que era antes de esta coyuntura.
Por eso no hay que echar campanas al vuelo y hacer como que ya está todo “como antes”, pues Sinaloa todavía registra más de 6 mil empleos formales por debajo de los que había en agosto de 2024, justo unos días antes de que la ola de violencia se desatara en el estado, y más específicamente en Culiacán.
Esa pérdida nos recuerda que hay mucho por hacer todavía en materia económica por parte de las autoridades y que es el reclamo de muchos empresarios que siguen sintiendo que las medidas emergentes desde la Sedeco se han quedado muy cortas de cara a la gravedad de la situación y sobre todo a que ya llevamos un año y no se ve para cuando podamos volver a la normalidad.
Que no, Vargas, entienda
Hay historias de desamores como la clásica película de “500 días con ella”, caracterizadas por tener un protagonista ciertamente aferrado a una idea o relación que nomás no da.
Y bueno, ni siquiera el personaje principal de aquella trama fue tan insistente como lo ha sido el ex Alcalde de Ahome, Gerardo Vargas Landeros, con que debe regresar a despachar en el Ayuntamiento, quesque porque así lo ordenó un Juez de Zacatecas.
Ayer hasta pidió junto con sus abogados una audiencia especial sobre el caso de la renta de patrullas, y fue a echarse la vuelta por la Sede de Justicia Penal en Culiacán, en donde ya tiene reservada la silla que han compartido otros ex alcaldes de Morena acusados de corrupción y el mismísimo Rector de la UAS, Jesús Madueña Molina.
Según el razonamiento de Vargas Landeros y su equipo jurídico, el Juez Primero de Distrito de Zacatecas dio una suspensión definitiva contra el proceso de desafuero, y su lógica fue que entonces recuperó eso le habría devuelto el fuero constitucional, y por tanto ya no podría ser juzgado.
Así de rebuscado, ingenioso y enredoso como se leyó, así de rebuscado, ingenioso y enredoso fue el argumento.
Sorprendente habrá sido solo para ellos que el Juez Carlos Alberto Herrera negó esa petición, partiendo de lo más lógico que es que dicha resolución de amparo ni siquiera fue una sentencia firme, y poquito le faltó para decirle “te fuiste conchita al mar”, porque Vargas sigue vinculado a proceso.
Si hay un ejemplo de perseverancia es el de este compa, porque ayer también se ventiló por el Juez que no es el único amparo que ha tramitado, sino que presentó este recurso en Querétaro, Baja California, Durango y por supuesto en Sinaloa, y en todos lo batearon como en noche de grandes ligas.
Lo más tragicómico es que el ex Alcalde tenía preparada esta misma petición de suspender otro juicio en su contra por abuso de autoridad, pero como tantearon el agua a los camotes y no les dio resultado en la primera audiencia, ya mejor desistieron para la segunda.
Diez mil elementos de seguridad para cuidar las fiestas patrias en Sinaloa. El número impresiona, pero también genera preguntas: ¿qué tanto se necesita blindar una celebración que, en teoría, debería ser símbolo de unidad, alegría y confianza ciudadana?
El Gobernador Rocha asegura que cada quien decidirá si acude o no al Grito en Culiacán, respetando las voces que circulan en redes sociales llamando a no asistir. Es democrático, pero también deja entrever que el miedo está presente, y que el ánimo festivo no es suficiente para disiparlo del todo.
El despliegue interinstitucional será robusto, con fuerzas municipales, estatales y federales. Sin embargo, el hecho de que deba recurrirse a semejante operativo para garantizar tranquilidad habla de la fragilidad de esa misma tranquilidad. La confianza en las instituciones no se decreta, se construye, y ahí es donde se aprecia el hueco que llevamos un año sintiendo.
Los artistas anunciados siguen en la cartelera, pese a llamados en redes para que cancelen. Nadie ha declinado aún, pero la fiesta se percibe bajo la sombra de la desconfianza. ¿Habrá Grito masivo o será un eco apagado en la explanada? Al final, más allá del número de elementos desplegados, la verdadera medida será si la ciudadanía decide hacerse presente en la fiesta oficial o quedarse en casa.
pero todavía falta
El dato de los más de 10 mil nuevos empleos registrados en el IMSS durante el mes de agosto pasado es una buena noticia sin duda para el estado, porque aún cuando éstas se ubican en la típica tendencia de la estacionalidad anual tras el fin del verano, que es la temporada más baja del año, sí se nota un repunte que vale la pena reconocer.
Lo señalamos porque, en el contexto de una guerra criminal que sigue tan vigente como desde el primer día, el dato demuestra que hay una resiliencia económica que da la pelea al impacto de la crisis de violencia.
Pero celebrar una cifra mensual mientras la comparación interanual es negativa no es lo correcto, porque aunque da una idea de avance, la brecha contra el año pasado nos sigue diciendo que la economía es ahora más pequeña de lo que era antes de esta coyuntura.
Por eso no hay que echar campanas al vuelo y hacer como que ya está todo “como antes”, pues Sinaloa todavía registra más de 6 mil empleos formales por debajo de los que había en agosto de 2024, justo unos días antes de que la ola de violencia se desatara en el estado, y más específicamente en Culiacán.
Esa pérdida nos recuerda que hay mucho por hacer todavía en materia económica por parte de las autoridades y que es el reclamo de muchos empresarios que siguen sintiendo que las medidas emergentes desde la Sedeco se han quedado muy cortas de cara a la gravedad de la situación y sobre todo a que ya llevamos un año y no se ve para cuando podamos volver a la normalidad.
Hay historias de desamores como la clásica película de “500 días con ella”, caracterizadas por tener un protagonista ciertamente aferrado a una idea o relación que nomás no da.
Y bueno, ni siquiera el personaje principal de aquella trama fue tan insistente como lo ha sido el ex Alcalde de Ahome, Gerardo Vargas Landeros, con que debe regresar a despachar en el Ayuntamiento, quesque porque así lo ordenó un Juez de Zacatecas.
Ayer hasta pidió junto con sus abogados una audiencia especial sobre el caso de la renta de patrullas, y fue a echarse la vuelta por la Sede de Justicia Penal en Culiacán, en donde ya tiene reservada la silla que han compartido otros ex alcaldes de Morena acusados de corrupción y el mismísimo Rector de la UAS, Jesús Madueña Molina.
Según el razonamiento de Vargas Landeros y su equipo jurídico, el Juez Primero de Distrito de Zacatecas dio una suspensión definitiva contra el proceso de desafuero, y su lógica fue que entonces recuperó eso le habría devuelto el fuero constitucional, y por tanto ya no podría ser juzgado.
Así de rebuscado, ingenioso y enredoso como se leyó, así de rebuscado, ingenioso y enredoso fue el argumento.
Sorprendente habrá sido solo para ellos que el Juez Carlos Alberto Herrera negó esa petición, partiendo de lo más lógico que es que dicha resolución de amparo ni siquiera fue una sentencia firme, y poquito le faltó para decirle “te fuiste conchita al mar”, porque Vargas sigue vinculado a proceso.
Si hay un ejemplo de perseverancia es el de este compa, porque ayer también se ventiló por el Juez que no es el único amparo que ha tramitado, sino que presentó este recurso en Querétaro, Baja California, Durango y por supuesto en Sinaloa, y en todos lo batearon como en noche de grandes ligas.
Lo más tragicómico es que el ex Alcalde tenía preparada esta misma petición de suspender otro juicio en su contra por abuso de autoridad, pero como tantearon el agua a los camotes y no les dio resultado en la primera audiencia, ya mejor desistieron para la segunda.
Diez mil elementos de seguridad para cuidar las fiestas patrias en Sinaloa. El número impresiona, pero también genera preguntas: ¿qué tanto se necesita blindar una celebración que, en teoría, debería ser símbolo de unidad, alegría y confianza ciudadana?
El Gobernador Rocha asegura que cada quien decidirá si acude o no al Grito en Culiacán, respetando las voces que circulan en redes sociales llamando a no asistir. Es democrático, pero también deja entrever que el miedo está presente, y que el ánimo festivo no es suficiente para disiparlo del todo.
El despliegue interinstitucional será robusto, con fuerzas municipales, estatales y federales. Sin embargo, el hecho de que deba recurrirse a semejante operativo para garantizar tranquilidad habla de la fragilidad de esa misma tranquilidad. La confianza en las instituciones no se decreta, se construye, y ahí es donde se aprecia el hueco que llevamos un año sintiendo.
Los artistas anunciados siguen en la cartelera, pese a llamados en redes para que cancelen. Nadie ha declinado aún, pero la fiesta se percibe bajo la sombra de la desconfianza. ¿Habrá Grito masivo o será un eco apagado en la explanada? Al final, más allá del número de elementos desplegados, la verdadera medida será si la ciudadanía decide hacerse presente en la fiesta oficial o quedarse en casa.
pero todavía falta
El dato de los más de 10 mil nuevos empleos registrados en el IMSS durante el mes de agosto pasado es una buena noticia sin duda para el estado, porque aún cuando éstas se ubican en la típica tendencia de la estacionalidad anual tras el fin del verano, que es la temporada más baja del año, sí se nota un repunte que vale la pena reconocer.
Lo señalamos porque, en el contexto de una guerra criminal que sigue tan vigente como desde el primer día, el dato demuestra que hay una resiliencia económica que da la pelea al impacto de la crisis de violencia.
Pero celebrar una cifra mensual mientras la comparación interanual es negativa no es lo correcto, porque aunque da una idea de avance, la brecha contra el año pasado nos sigue diciendo que la economía es ahora más pequeña de lo que era antes de esta coyuntura.
Por eso no hay que echar campanas al vuelo y hacer como que ya está todo “como antes”, pues Sinaloa todavía registra más de 6 mil empleos formales por debajo de los que había en agosto de 2024, justo unos días antes de que la ola de violencia se desatara en el estado, y más específicamente en Culiacán.
Esa pérdida nos recuerda que hay mucho por hacer todavía en materia económica por parte de las autoridades y que es el reclamo de muchos empresarios que siguen sintiendo que las medidas emergentes desde la Sedeco se han quedado muy cortas de cara a la gravedad de la situación y sobre todo a que ya llevamos un año y no se ve para cuando podamos volver a la normalidad.
Hay historias de desamores como la clásica película de “500 días con ella”, caracterizadas por tener un protagonista ciertamente aferrado a una idea o relación que nomás no da.
Y bueno, ni siquiera el personaje principal de aquella trama fue tan insistente como lo ha sido el ex Alcalde de Ahome, Gerardo Vargas Landeros, con que debe regresar a despachar en el Ayuntamiento, quesque porque así lo ordenó un Juez de Zacatecas.
Ayer hasta pidió junto con sus abogados una audiencia especial sobre el caso de la renta de patrullas, y fue a echarse la vuelta por la Sede de Justicia Penal en Culiacán, en donde ya tiene reservada la silla que han compartido otros ex alcaldes de Morena acusados de corrupción y el mismísimo Rector de la UAS, Jesús Madueña Molina.
Según el razonamiento de Vargas Landeros y su equipo jurídico, el Juez Primero de Distrito de Zacatecas dio una suspensión definitiva contra el proceso de desafuero, y su lógica fue que entonces recuperó eso le habría devuelto el fuero constitucional, y por tanto ya no podría ser juzgado.
Así de rebuscado, ingenioso y enredoso como se leyó, así de rebuscado, ingenioso y enredoso fue el argumento.
Sorprendente habrá sido solo para ellos que el Juez Carlos Alberto Herrera negó esa petición, partiendo de lo más lógico que es que dicha resolución de amparo ni siquiera fue una sentencia firme, y poquito le faltó para decirle “te fuiste conchita al mar”, porque Vargas sigue vinculado a proceso.
Si hay un ejemplo de perseverancia es el de este compa, porque ayer también se ventiló por el Juez que no es el único amparo que ha tramitado, sino que presentó este recurso en Querétaro, Baja California, Durango y por supuesto en Sinaloa, y en todos lo batearon como en noche de grandes ligas.
Lo más tragicómico es que el ex Alcalde tenía preparada esta misma petición de suspender otro juicio en su contra por abuso de autoridad, pero como tantearon el agua a los camotes y no les dio resultado en la primera audiencia, ya mejor desistieron para la segunda.