"Fomentan lectura con escritores sinaloenses, en el Cervantino"

GUANAJUATO._ Los guanajuatenses están solicitando que la Sala de Lectura que se encuentra en la Casa de Sinaloa se quede en la ciudad, por el entusiasmo con el que los niños están participando en los talleres para promover la lectura, en los que se está trabajando con cuentos de Ramón Rubín y Dámaso Murúa.
El director general de las Salas de Lectura a nivel nacional, Jesús Heredia, que es representante de Conaculta, y Raúl Quiroz, encargado de la Sala de Lectura en Culiacán, reunieron esfuerzos y experiencias para instalar un espacio acogedor para promover el hábito de la lectura en la Casa de Sinaloa durante el Festival Cervantino.
El piso y paredes del acogedor lugar está tapizado con papel azul agua, dibujos de ballenas, pelícanos y focas, una pequeña casa de espejos, elementos con los que crearon un diseño de vanguardia que consigue crear un acogedor lugar para promover la lectura.
Cerca del techo, los retratos de Inés Arredondo, Gilberto Owen, Ramón Rubín, José Limón y Óscar Liera observan a los lectores y completan la decoración del espacio.
Raúl Quiroz es el encargado de animar el espacio.
"Un grupo de talleristas está colaborando en la Sala de Lectura de Sinaloa, ellos trabajan con los niños, les cuenta las historias que narra Ramón Rubín en el libro que contiene algunos de sus cuentos. Los niños se divierten mucho y les queda claro que el mundo de la lectura es maravilloso", comentó.
"Para los talleres de adolescentes y jóvenes estamos laborando con poemas de Jaime Labastida y con la novela de Élmer Mendoza, El amante de Janis Joplin".
También se está trabajando con los adultos en un interesante taller que despierta los sentidos disfrutando los sabores, olores, clima y atmósferas que están plasmadas en los cuentos de Inés Arredondo.
La Sala de Lectura de la Casa de Sinaloa también está promoviendo el recién editado libro Me he querido mentir que no me ama, que publica obra del poeta sinaloense Gilberto Owen.