Contexto atroz
Cuando se da lectura al informe semestral de la organización Causa en Común se nota desde el título a qué nos enfrentamos: Galería del horror, atrocidades y delitos de alto impacto, enero-junio 2025.
Y el horror se agranda cuando vemos que “se considera como ‘atrocidad’ el uso intencional de la fuerza física para causar muerte, laceración o maltrato extremo; para causar la muerte de un alto número de personas; para causar la muerte de personas especialmente vulnerables o de interés político; y/o para provocar terror, entre otros casos que por su brutalidad o naturaleza extrema deben ser visibilizados y documentados”.
Causa en Común enlista 22 atrocidades posibles que se cometen en México: masacres; fosa clandestina; mutilación, descuartizamiento o desmembramiento y destrucción o disolución de cadáveres; calcinamiento; asesinato con tortura...
También incluye asesinatos de niños y adolescentes, de mujeres con crueldad extrema, de defensores de derechos humanos, de grupos vulnerables, de periodistas, de actores políticos y de funcionarios y actores de relevancia en materia de seguridad.
Jornadas de violencia, actos violentos contra la autoridad, desplazamiento forzado...
Todo un listado que por desgracia a los sinaloenses nos es altamente conocido y cercano.
No en balde Sinaloa ocupó en este análisis el primer lugar en número de atrocidades y número de víctimas de atrocidades de todo el País, durante el primer semestre de este año.
Y este contexto atroz, que se encarrila a cumplir un año de violencia ininterrumpida en nuestro estado no hace sino crecer, sin que veamos siquiera un poco de luz al final del túnel.