‘Hay avance pero queremos una solución’, dice secretaria de agricultura de EU por tratado de agua con México

Animal Político
12 abril 2025

El tratado de agua entre México y EU regula cómo ambas naciones deben repartirse el líquido de los ríos Bravo y Colorado, que forman parte del límite territorial entre los dos países

La secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, reconoció que hay avances en las negociaciones con México sobre el envío de agua, sin embargo, dijo que no es suficiente y que se necesita una solución.

“Esto es un avance. Pero lo que queremos, y lo que los agricultores estadounidenses merecen, es una solución”, escribió en su cuenta de redes sociales.

La funcionaria respondió a los dichos de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre que México enviaría agua “de inmediato” a los agricultores de Texas para compensar el déficit respecto del Tratado de Aguas de 1944.

El viernes por la tarde, Rollins y el subsecretario de Estado, Chris Landau, tuvieron una llamada con su homólogo en México, Julio Berdegué, para abordar la crisis por el agua y la afectación a los agricultores norteamericanos.

“La agricultura estadounidense lleva años pidiendo este alivio y no lo ha conseguido. Lo que ha cambiado ahora es que hay un presidente estadounidense dispuesto a hacer lo necesario para que esto suceda. Se agradece la atención rápida y enfocada del secretario Berdegué. Avanzando y resolviendo esta crisis para nuestros agricultores”.

Por otra parte, Berdegué informó que México ratificó el tratado para evitar la imposición de aranceles y cumplir acuerdos, sin embargo, advirtió que se hará tomando en cuenta las condiciones de sequía de los últimos años.

Sheinbaum dice que tratado de agua entre México y EU “es justo”

La presidenta Claudia Sheinbaum descartó que México deba renegociar el Tratado de Aguas que tiene con Estados Unidos desde 1944 ante las condiciones climáticas que dificultan la captación del líquido en el río Bravo y aseguró que ya se están buscando alternativas para cumplir con la parte que se debe enviar a Texas.

“Es un tratado justo, de hecho entrega más Estados Unidos de lo que nosotros entregamos porque así es la cantidad de agua que hay en cada lugar, no es más que eso técnicamente establecido”, dijo durante su conferencia matutina.

El Tratado de Aguas de 1944 establece que México y Estados Unidos deben compartir las aguas de los ríos Bravo y Colorado que discurren por la frontera común.

De esa manera, Estados Unidos debe enviar una cantidad de agua desde el río Colorado al año y México debe hacerle llegar una parte de la del río Bravo en ciclos de cinco años. El último termina en octubre de 2025.

Sin embargo, cuando se firmó no se tuvieron en cuenta problemas futuros de sequía ni el aumento de la población, lo que ha provocado fricciones.

Amenaza arancelaria por el agua

El presidente estadounidense, Donald Trump, lanzó una nueva amenaza arancelaria en caso de que México no entregue a Texas la cantidad de agua que le debe y que asciende a los 1,3 millones de acres-pies.

“México les ha estado robando el agua a los agricultores texanos”, denunció el republicano en su plataforma Truth Social.

Horas después, la presidenta Sheinbaum informó a través de su cuenta de X que el miércoles 9 de abril se envió una propuesta integral al subsecretario del Departamento de Estado de Estados Unidos para atender el envío de agua a Texas, la cual incluye acciones “de muy corto plazo”.

Sheinbaum indicó que, además de la propuesta, la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), el organismo binacional que se encarga de resolver las diferencias entre México y Estados Unidos en la materia, está trabajando para identificar alternativas técnicas viables que permitan a México cumplir con el tratado pese a las condiciones de sequía que se han extendido casi por cuatro años.

Según precisó, se está haciendo una “revisión de la parte técnica” y no del tratado mismo para resolver este problema. Por lo pronto, adelantó, México hará una “entrega inmediata” de un número determinado de millones de metros cúbicos de agua a los agricultores de Texas en función de la cantidad disponible en el río Bravo.