Toman protesta de Bandera al personal de marineros del SMN clase 2006, remisos y mujeres voluntarias

Belizario Reyes
05 mayo 2025

El acto fue encabezado por el inspector de la Cuarta Región Naval, vicealmirante Sergio Retes Rodríguez

Un total de 173 marineros del Servicio Militar Nacional clase 2006, remisos y mujeres voluntarias, rindieron protesta a la Bandera este lunes y juraron lealtad al Lábaro Patrio durante una ceremonia realizada en la explanada de la Escuela Náutica Mercante “Capitán de Altura Antonio Gómez Maqueo”, en este puerto.

El acto fue encabezado por el inspector de la Cuarta Región Naval, vicealmirante Sergio Retes Rodríguez, en representación del comandante de dicha Región Naval, vicealmirante José Daniel Reséndiz Sandoval, quien tomó la protesta de bandera a los conscriptos que realizan su Servicio Militar Nacional en ese mando naval con sede en Mazatlán.

“Hoy nos convoca un acto profundamente significativo para la vida de toda nación libre y soberana: el juramento de fidelidad a nuestra Bandera Nacional”, expresó el capitán de navío Édgar Érick González Torres, jefe de la Sección Primera de la Cuarta Región Naval, ante autoridades civiles, militares, clases, marinería y familiares de los jóvenes conscriptos.

González Torres subrayó el significado histórico de la fecha:

“Este día recordamos con orgullo la gesta del 5 de mayo de 1862, en la que el valor del pueblo mexicano, guiado por un ideal superior de libertad y justicia, logró lo impensable frente a un ejército invasor. Aquel día en Puebla no fue solo una victoria militar, fue una victoria del carácter nacional, de la dignidad del mexicano común que se puso de pie por su tierra.

Ese mismo espíritu es el que hoy vemos reflejado en cada uno de los jóvenes que integran la clase 2006 del Servicio Militar Nacional. Ciudadanos de vocación firme que han respondido al llamado del deber, no por imposición, sino por convicción.”

El jefe de la Sección de Personal añadió que este juramento implica un compromiso profundo:

“Hoy no solo juran Bandera, hoy demuestran que entienden que el Servicio Militar no es únicamente un trámite administrativo. Es, en esencia, un acto de entrega, un deber cívico que implica disciplina, sacrificio, respeto a los símbolos patrios y amor a México.”

Afirmó además:

“A ustedes, conscriptos del Servicio Militar Nacional, los presento hoy con orgullo y plena confianza ante las autoridades civiles y militares, así como a sus respetables familias, como mexicanos que han dado un paso firme en la senda del deber.

Si culminan con honor este proceso, pasarán a formar parte de las reservas de la Armada de México, integrando así un componente esencial de nuestra defensa nacional. Serán ciudadanos entrenados con formación moral, física y cívica, preparados para responder a la patria si ésta alguna vez los necesita.”

González Torres concluyó su mensaje diciendo:

“Este día, dichos jóvenes han dado su palabra, que vale más que un contrato. Es una promesa que tiene el peso de la historia. Defender a la patria no siempre significa tomar las armas, pero siempre significa servirle con integridad en cualquier ámbito en que la vida los lleve.

Como trabajadores, estudiantes, profesionales, padres o líderes, lleven con orgullo el hecho de haber servido bajo los principios de honor, deber, lealtad y patriotismo que distinguen a nuestras Fuerzas Armadas. Sigan firmes, sean ejemplo, sean dignos de este juramento. Nuestro México necesita gente comprometida y con amor a su patria, y hoy la Nación cuenta con ustedes.”

En representación de sus compañeros, el joven del SMN Luis Alejandro Bueno García compartió su sentir:

“No es casualidad que esta ceremonia se realice un 5 de mayo, fecha profundamente marcada en la historia de México como símbolo de resistencia, valentía y unidad nacional.

Aquel día del año 1862, en los fuertes de Loreto y Guadalupe, no solo se defendió un territorio: se defendió el espíritu de México. Fueron civiles y soldados del pueblo, sin grandes recursos ni ventajas, quienes enfrentaron con coraje a un enemigo numéricamente superior. Lo hicieron movidos por una sola causa: el amor a la patria.”

Bueno García recalcó:

“Ese precedente nos da perspectiva. Nos recuerda que no es el grado ni el uniforme lo que define al defensor de la Nación, sino el compromiso, la convicción y el honor con los que se actúa.

Nosotros, la clase 2006, remisos y mujeres voluntarias, hemos sido recibidos por la Secretaría de Marina con disciplina, orientación y valores. En estos primeros meses de adiestramiento hemos aprendido que el Servicio Militar Nacional no es una simple obligación, es una escuela de vida, un llamado al deber cívico y una oportunidad para servir con honor a nuestro país.”

El conscripto finalizó:

“Hoy, al jurar esta Bandera, declaramos públicamente nuestra voluntad de ser dignos hijos e hijas de México. La Secretaría de Marina nos ha formado en valores fundamentales: honor, deber, lealtad y patriotismo. Valores que se nos enseñan no solo con discursos, sino con el ejemplo diario: la puntualidad, el respeto al compañero, la disciplina en la instrucción y el compromiso con cada responsabilidad.

Servir no es simplemente presentarse al llamado, es responder con el corazón, con voluntad firme y espíritu elevado. Sabemos que el camino apenas comienza, que aún nos esperan meses de formación y crecimiento, pero también que la lealtad no se mide en tiempo, sino en la disposición del corazón.”

La ceremonia también fue presidida por:

El secretario del Ayuntamiento de Mazatlán, Moisés Ríos Pérez, en representación de la alcaldesa Estrella Palacios Domínguez.

La Coronel cirujano dentista Patricia Verónica del Castillo López, en representación del comandante de la Tercera Región Militar, general de División Guillermo Briseño Lobera.

El director de la Escuela Náutica Mercante “Antonio Gómez Maqueo”, ingeniero mecánico naval Alejandro Camacho Arteaga, entre otros invitados.