Podría Pablo Lyle librar demanda millonaria por un tecnicismo
La familia de la víctima, exige una compensación por gastos funerarios, atención psicológica y pérdida de ingresos, también se ha visto afectada, dicha demanda está en riesgo de ser desechada si no se reactiva en menos de tres semanas
Un tecnicismo legal podría librar al actor mexicano Pablo Lyle de pagar una indemnización de 5 millones de dólares, justo cuando se acerca al final de su condena por homicidio involuntario en una prisión de Florida.
La demanda civil en su contra, presentada por la familia de Juan Ricardo Hernández, el hombre cubano de 63 años que murió tras un altercado vial en 2019, está en riesgo de ser desechada si no se reactiva en menos de tres semanas.
El proceso civil que enfrenta Lyle desde hace años por la muerte de Hernández está prácticamente en pausa. La audiencia está programada para el 31 de julio de 2025 fue suspendida debido a que el actor no tiene abogado que lo represente actualmente en ese litigio.
Esta falta de representación ha generado un estancamiento que podría terminar en la cancelación definitiva del caso, señala elimparcial.com
La familia de la víctima, que exige una compensación por gastos funerarios, atención psicológica y pérdida de ingresos, también se ha visto afectada. Su equipo legal renunció recientemente, lo que dejó la demanda en un limbo legal.
“Ahora tiene un lapso, no mayor a 20 días, para reactivarla, de lo contrario, automáticamente se desestimará el caso” informó el medio.
Esto significa que si la parte demandante no reactiva el caso antes del 20 de agosto de 2025, el tribunal podría cerrar el expediente sin emitir una resolución sobre el pago de la indemnización.
Si el caso civil es desestimado, Pablo Lyle quedaría libre de pagar los cinco millones de dólares solicitados por la familia de Hernández. Además, se evitaría que el actor tenga que presentar documentos que prueben su situación económica o enfrentar un juicio que evalúe el impacto emocional y financiero del incidente en los familiares de la víctima.
Este posible desenlace legal podría representar una gran ventaja para el actor mexicano, quien ha enfrentado una serie de desafíos legales y personales desde el incidente ocurrido en marzo de 2019, cuando golpeó a Hernández tras una discusión vial en una avenida de Miami. El hombre cayó al suelo, sufrió una lesión cerebral y murió días después en un hospital.
Lyle fue sentenciado en 2022 a cinco años de prisión, ocho de libertad condicional y 100 horas de servicio comunitario. Actualmente se encuentra en la Everglades Correctional Institution, en el sur de Florida.
Aunque su liberación estaba prevista originalmente para septiembre de 2027, su expareja Ana Araujo reveló en agosto de 2024 que podría salir antes gracias a beneficios por buena conducta.
“Sale en diciembre de 2026, son nuestras cuentas, contando con buen comportamiento. Lo poco que yo sé es que lo que tú puedes hacer por ley allá es el 85 por ciento de tu sentencia” explicó.
Si ese cálculo se cumple, quedarían alrededor de 17 meses para que el actor recupere su libertad, aunque después deberá cumplir los ocho años de libertad condicional bajo supervisión y completar las horas de servicio comunitario establecidas por el juez.
Los próximos días serán decisivos. Si la familia Hernández no reactiva la demanda civil en el plazo establecido, el proceso terminará y Pablo Lyle no tendrá que responder económicamente por los daños.
Aun así, su historial legal quedará marcado por el caso que lo convirtió en uno de los rostros más controversiales del espectáculo mexicano en años recientes.
Mientras tanto, Lyle continúa cumpliendo su sentencia en prisión, con la mirada puesta en diciembre de 2026 y la esperanza de un nuevo comienzo fuera del sistema penitenciario.