Jesmy tras rescatar a ‘Loquita’, una perrita abandonada con cáncer, descubrió su espíritu animalista
Desde hace 15 años, Jesmy Mora Castañeda rescata perros y gatos para darles un mejor hogar
EL ROSARIO._ Hace 15 años, Jesmy Mora Castañeda se encontró a “Loquilla” en la carretera, una perrita con cáncer en sus genitales, hecho que sirvió para que descubrir su vocación de ayudar a mascotas; perros y gatos que han sufrido maltrato o abandono.
“El primero lo encontré en la carretera, esa perrita la tiraron porque tenía cáncer en su partes íntimas y de ahí empecé y dije, ay no”, relató.
Al convertirse en madre soltera de dos pequeños, Mateo de 9 años, quien vive con autismo y Matías de 3 años, ha tenido que intercalar el tiempo con esta labor y dividir los ingresos de su trabajo en un despacho contable entre sus hijos y sus mascotas rescatadas que son un total de 15 entre perros y gatos.
Razón por la cual, sostiene que le dejan poco para la vanidad femenina señalando su ropa y su imagen.
“Es algo inexplicable, mira es lo que yo le digo a las mayoría de las personas, en ocasiones nos dicen ‘ay, la loca de los perros, la loca de los gatos’, pero mira si no hay voz por ellos, ellos no tienen voz pero nosotros sí podemos ayudarlos”, explicó sobre su acción altruista.
La vecina de Otates, refirió que desde aquel momento han pasado 15 años al punto de que desconoce el número exacto de mascotas que ha acogido y a las que ha buscado un hogar que le den una vida de calidad.
“Como unas 50 yo digo, 60 yo digo, a lo largo de mi vida o más... Pues desde chiquita me han gustado los animales en realidad, desde pequeña”.
Recordó, que tal ha sido su gusto que aplicó para ingresar a la carrera de Médico Veterinario pero por una situación de inseguridad en ese momento sus papás no le permitieron irse a la capital del estado, Culiacán para iniciar sus estudios optando entrar a Comercio Internacional.
Sus días, inician a las seis de la mañana para atender en primer lugar a sus hijos y vayan a la escuela, pero además alimenta a las mascotas, para después salir a su trabajo a la cabecera municipal, y al regresar es hacer tareas, bañarles para finalizar el día.
Un duro golpe, señaló, que hace un año un vecino le envenenó 12 gatitos al colocar veneno en el plato del alimento, acabando con sus vidas una labor de año y medio de alimentarlos vacunarlos e incluso esterilizarlos.
“Que no tienen corazón, o no sé en realidad qué piensan al hacerlo. Esos me los envenenaron fíjate, puse un plato y alcancé a quitar la mamá de estos, pero todo el gatito que llegaba callejero se murieron, hasta pájaros había, tengo fotos, incluso vine a poner una denuncia pero igual nunca procedió”.
Lamentó que la vida de las mascotas es considerara por muchos menos valiosa por ser animales, por lo que pidió se considerara los talentos que tienen al servicios de los humanos, como aquellos perros que son rescatistas, de apoyo para personas que tiene alguna discapacidad.
“Y digo yo, mira la gente los mata, los envenena, los atropellas, porque me ha tocado ver gente que atropella animales así a propósito, “ es un animal tíralo a la basura y ya; la verdad es muy triste la situación porque hay mucho maltrato animal”.
Reconoce no ha sido fácil, pues además de llevar comida a mascotas en espacios públicos como el Santuario de Nuestra Señora del Rosario o el panteón municipal, y el alimento cada vez cuesta más caro ya que de su ingresos mínimo destina por semana 400 pesos, más aparte vacunas y tratamiento para desparasitar. Motivo por el cual pidió que quien así lo deseen y puedan donar alimentos se pueden contactar con ella al número 694 118 3147.