Rafael Devers es el cañonero que tanto buscó San Francisco
‘Lo necesitábamos’, afirmó el mánager Bob Melvin sobre la llegada del toletero dominicano al club californiano
LOS ÁNGELES._ El presidente del departamento de operaciones de beisbol, Buster Posey, no esperó para conseguir un bate de impacto muy necesario para la alineación de los Gigantes.
En un impactante e inesperado cambio, más de un mes antes de la Fecha Límite de canjes del 31 de julio, los Gigantes adquirieron al estelar cañonero dominicano Rafael Devers de los Medias Rojas a cambio de Jordan Hicks, Kyle Harrison, el dominicano José Bello y la selección de primera ronda del Draft del año pasado (13ra selección global), James Tibbs III.
Con el tercera base Matt Chapman fuera por varias semanas debido a una lesión en la mano derecha, los Gigantes sintieron la necesidad de tomar medidas audaces para reforzar su ofensiva, que ha tenido problemas para apoyar al excelente cuerpo de lanzadores del club este año. Devers, tres veces convocado al Juego de Estrellas, se desempeñó principalmente como bateador designado de Boston esta campaña, pero es un tercera base natural que podría ayudar a cubrir la esquina caliente mientras Chapman está fuera.
“Creo que el bate es muy especial”, le dijo Posey a los periodistas después de la derrota de los Gigantes por 5-4 ante los Dodgers el domingo. “Es realmente difícil adquirir este tipo de talento en este punto de su carrera. Obviamente, estamos asumiendo mucho dinero. Estamos cediendo algunos lanzadores. Estamos dando nuestra selección de primera ronda del año pasado, así que no fue gratis. Pero sentimos que esta era una oportunidad para arriesgarnos”.
La noticia del acuerdo se dio a conocer minutos antes de que Harrison abrierá el juego final de la serie de los Gigantes en Los Ángeles el domingo, lo que obligó al club a mandar a Sean Hjelle en su lugar. Harrison, nativo de Danville, California, pasó toda su temporada de novato en la rotación de abridores de San Francisco el año pasado, pero abrió la campaña del 2025 en Triple-A Sacramento después de no poder asegurar un puesto entre los cinco abridores al terminar los Entrenamientos Primaverales.
Los Gigantes utilizaron a Harrison como relevista por primera vez en su carrera cuando lo llamaron de nuevo a las Grandes Ligas el mes pasado, aunque el zurdo de 23 años terminó volviendo a la rotación cuando Justin Verlander fue a la lista de lesionados de 15 días por una distensión en el pectoral derecho el 22 de mayo.
Harrison registró una efectividad de 4.91 en 18.1 innings en cuatro aperturas como abridor para los Gigantes, pero con Verlander preparándose para regresar al montículo —posiblemente tan pronto como su próxima serie de tres juegos contra los Guardianes—, parecía ser el hombre a quedar por fuera de la rotación. Con una plétora de jóvenes abridores en la organización —incluyendo a Hayden Birdsong, Landen Roupp y el prospecto número 2 Carson Whisenhunt—, los Gigantes finalmente estuvieron dispuestos a desprenderse de Harrison para conseguir a Devers.
“Kyle Harrison es un muchacho que tiene un tremendo potencial”, aseguró Posey. “Siempre he sido muy franco sobre lo que creo que es la base del éxito para una organización. Es el pitcheo y la defensa. Renunciar a un hombre así no es fácil para nosotros”.
Devers estaba en el segundo año de una extensión de contrato de 10 años y 313.5 millones de dólares con los Medias Rojas que firmó en el 2023. Se había convertido en la cara de la franquicia en Boston desde su debut en el 2017 y emergió como un contribuyente clave cuando el club ganó la Serie Mundial del 2018, pero hubo cierta tensión cuando el equipo firmó a otro antesalista –Alex Bregman– esta temporada muerta.
Un Devers insatisfecho dijo inicialmente que no estaría dispuesto a pasar al rol de bateador designado, pero luego se retractó y aceptó su nuevo puesto. La relación entre ambas partes se fue distanciando aún más a principios de mayo, cuando le dijo a los Patirrojos que no estaba dispuesto a jugar en primera base después de que Triston Casas sufriera una lesión que puso fin a su temporada.
En San Francisco, Devers, de 28 años, probablemente dividirá su tiempo entre la tercera base y el puesto de designado, aunque los Giants quieren hablar con él primero antes de determinar dónde usarlo.
El venezolano Wilmer Flores es actualmente el designado principal de los Gigantes, por lo que podría pasar a alternarse con Dominic Smith en la primera base cuando Chapman regrese. El zurdo Devers tiene un OPS+ de por vida de 128 con una línea de .279/.349/.510 en sus nueve años en las Grandes Ligas. Está bateando .272 con un OPS de .905, 15 bambinazos y 58 carreras impulsadas en 73 desafíos en el 2025 y debería convertirse instantáneamente en el bateador más temible en la alineación de San Francisco.
Los Medias Rojas viajarán al Oracle Park para una serie de tres juegos este fin de semana. Probablemente será la primera vez que Devers enfrente a su ex equipo en lo que de repente es un choque muy esperado.
“Esto es algo que realmente necesitábamos”, dijo el mánager Bob Melvin a los reporteros. “Tuvimos que dar mucho para conseguirlo, pero esto encaja perfectamente. Es un bate zurdo de poder, un hombre que puede batear hacia el otro lado y conectar cuadrangulares en nuestro estadio. Está hecho a la medida para nosotros. Felicitaciones a la gerencia por lograr esto”.