Amainado

Lorenzo Q. Terán
06 agosto 2025

Los nubarrones que amenazaban tormenta han amainado un poco y eso abona a favor de un equipo negociador que designó la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y que ha sabido gestionar y negociar con eficiencia con el gobierno de nuestros vecinos del Norte. “México ha hecho todo para evitar los aranceles”, había declarado el Secretario de Economía, Marcelo Ebrard Causabón, que ha dirigido con acierto las negociaciones.

Desde luego cuentan otros factores, que no podemos dejar de reconocer. Entre ellos, la lucha que se despliega en el País contra el crimen organizado, que ha dado golpes demoledores, desmantelando laboratorios e incautando grandes cantidades de drogas. Los resultados en este rubro están a la vista y esta actitud del Gobierno mexicano no puede soslayarse con actitudes politiqueras de baja estofa.

Como lo hemos reiterado, se marcha por buen sendero. Hay aún flagelos que atañen a la sociedad toda y que no dejan de causar preocupación. La inseguridad es el rubro que más preocupa a la sociedad, que anhela que vuelva la paz y la tranquilidad a sus comunidades. La sociedad y el Gobierno deben comprometerse para recuperar la paz pública, sin la cual ninguna sociedad puede convivir en armonía.

No podemos soslayar que en el estado se viene aplicando, por parte del Gobierno federal, un plan de seguridad que ha dado resultados ciertos, pese a la narrativa sesgada que no reconoce lo positivo en el combate a la inseguridad. Hay una presencia permanente de los cuerpos de seguridad, con el fin primordial de brindar protección a los ciudadanos. Si los hechos de violencia no se han desbordado, se debe al despliegue permanente de vigilancia que realizan las fuerzas del orden, tanto en la ciudad como en las rancherías.

Con la coordinación de las fuerzas de seguridad a todos los niveles, vemos buenas expectativas para que las cosas mejores en corto plazo. Desde luego, hay una narrativa que no reconoce nada de avance, por más evidencias que muestran logros incontrastables. Es evidente que algunas voces interesadas quieren politizar los asuntos de seguridad, sin darse cuenta de que en este asunto tan delicado lo que debe primar es la unidad del gobierno y los ciudadanos.

Hay personeros, sobre todo de la política tradicional que, de manera tajante, critican como si no se hiciera nada. Frente a esa actitud no hay nada que valga, todo lo rechazan, de manera permanente. No son para nada objetivos y hasta parece que sus móviles no son los de mejorar la vida pública, sino más bien todo lo contrario, parecen hablar desde la herida de la derrota y la nostalgia por las prebendas perdidas. Lo bueno es que el pueblo tiene su propia lógica e interpreta las cosas de manera distinta, eso es lo que importa.

Por lo pronto, las expectativas del desarrollo del País caminan con buenos augurios. Todo indica que el futuro económico de México marcha positivamente, no se ven presagios negativos; por el contrario, se advierten buenos vientos en favor de un desarrollo con justicia social. Los puertos mexicanos se están ampliando, se están modernizando importantes vías férreas y creando infraestructura que detonen polos de progreso.

Afortunadamente, este País tiene un pueblo muy despierto y con buen nivel de politización reconocible. Eso tiene mucha importancia para que todo el proyecto que viene impulsando la Presidenta Sheinbaum llegue a buen puerto. Pese a toda la campaña catastrofista que, un día sí y el otro también, lanza el conservadurismo derrotado, la Presidenta Sheinbaum no descansa en promover el Plan México para detonar el desarrollo nacional y repartir la riqueza entre todos los mexicanos.

Hacia allá se camina con pasos firmes. Todos anhelamos una sociedad cada vez más equitativa y democrática. Ese es el rumbo hacia el que camina el País, hasta consolidar esa premisa sin cortapisas.